- 3 Tomates
- Vinagre de Jerez
- Aceite de oliva
- 1 Ajo
- 2 Lonchas de jamón
- Pan duro
- 1 Huevo cocido
- Sal
PREPARACIÓN
- Lavamos los tomates y cortamos en la base y en su parte superior.
- Cortamos segmentos lateralmente y de arriba abajo con el fin de obtener las semillas en “racimo” que nos servirán para preparar un pincho diferente a la elaboración del salmorejo.
- Guardamos estas semillas y reservamos.
- El resto del tomate lo aprovechamos para el salmorejo.
- Ponemos el tomate troceado en el vaso triturador, en compañía de un buen chorro de aceite de oliva y un chorro de vinagre de Jerez.
- Incorporamos un buen ajo sin germen y trituramos.
- Probamos, debe de quedar con buen sabor y espesillo, como una mayonesa aligerada.
- Con pan duro, obtenemos la miga retirando la corteza y desmigamos a dedo, llenando el fondo de una taza con una porción de miga.
- A esto añadimos un chorrito de aceite, un poco de sal y rellenamos de salmorejo, metiendo a la nevera a madurar.
- Por otro lado cocemos 1 huevo, pelamos y hacemos mimosa con la yema y la clara.
- Troceamos las lonchas de jamón, que junto con la mimosa de huevo servirán de guarnición al salmorejo.
- Con las semillas gelatinosas del tomate, formaremos otro aperitivo, acompañándolas de huevas de mujol, lumpo, etc.. sazonadas con una gotita de sal y un chorrito de aceite.
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